¿Ahorramos de verdad con el cambio de hora?

Seguro que has escuchado más de una vez voces a favor y en contra, del famoso cambio de hora en marzo y octubre. En Ferroservice no podemos inclinarnos hacia un lado u otro, pero sí podemos poner en la balanza sus pros y contras para que vosotros podáis tomar una decisión objetiva. Allá vamos.

Origen del cambio de hora

Se cuenta que fue Benjamin Franklin en 1784, siendo embajador de Estados Unidos en Francia, quien ya propuso algunas medidas para ahorrar energía:

• penalizar a los que usasen contraventanas o impidiesen que la luz entrase a sus habitaciones.
• hacer sonar las campanas para que todo el mundo se levantase a la misma hora y aprovechasen las horas de luz diurna.
• regular el consumo de velas.

La verdad es que no se llevaron a cabo ninguna de ellas pero sin duda comenzaba a planearse lo que sería el cambio de hora…

Años más tarde, en 1916 y durante la I Guerra Mundial, fue Alemania la que decidió cambiar la hora para ahorrar el tan necesario carbón. En Estados Unidos y España se comenzaría en 1918, aunque en los 50 se prescindió de esta medida para volver a ella en 1973, dada la primera crisis del petróleo. No fue hasta 2001 cuando se empieza a aplicar de forma indefinida en la Unión Europea.

Las voces oficiales del cambio de hora

El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) estima que el potencial de ahorro en iluminación en nuestro país puede llegar a ser de un 5%, lo que se traduce en unos 300 millones de euros.

La Comisión Europea en 1999 encargó un estudio exhaustivo sobre las repercusiones de la hora de verano en los Estados miembros de la Unión Europea. El estudio se dedicó a investigar, determinar y evaluar las consecuencias económicas y sociales positivas y negativas del sistema de la hora de verano en los principales sectores económicos implicados como la agricultura, la industria, el comercio, la banca, la salud pública, los transportes, la seguridad vial, el turismo y el ocio.

Una de las conclusiones del estudio es muy clara: “La hora de verano, que favorece la práctica de todo tipo de actividades de ocio con luz natural y, por consiguiente, de una manera mucho más cómoda, parece justamente adaptarse a las exigencias de la sociedad del nuevo milenio.” Aunque también dice que dadas las peculiaridades de cada sector de actividad y cada situación geográfica, dificulta alcanzar conclusiones universales.

A favor del cambio de hora

1. Ahorro energético. Más luz a lo largo del día supone un 5% menos del consumo eléctrico en España.
2. Ahorro económico. Menos consumo eléctrico, ahorro de unos 300 millones de euros.
3. Medio ambiente. Menor consumo de energía, menor contaminación ambiental.
4. Seguridad vial. Mejor visibilidad, reducción de accidentes
5. Comercio, Ocio y Turismo. Más luz, más horas de consumo.
6. Economía. mismo horario que colegas europeos facilita el comercio internacional
7. Salud. Más luz significa tener más vida social, practicar deporte y por lo tanto menos estrés. Mayor asimilación de la vitamina D, la vitamina del sol.

En contra del cambio de hora

1. ¿Ahorro energético? Ese ahorro de 300 millones de euros es una cantidad muy pequeña cuando se conoce el gasto energético total que es de 20.000 millones de euros.
2. ¿Ahorro económico? Cada familia española tan solo se ahorra 6 € al año, el resto del ahorro corresponde a las empresas y comercios. De hecho, la medida al ser general, consigue que en las zonas más calurosas se aumente el consumo de aire acondicionado por las tardes.
3. ¿Salud? Nuestro organismo sufre un jet lag del que le cuesta recuperarse. Sobre todo en el cambio de primavera (la hora menos). Algunos de sus síntomas: estado depresivo, somnolencia, astenia, irritabilidad, nerviosismo, cefaleas y dificultades para mantener la atención y la concentración. Incluso hay personas que presentan molestias digestivas.

Parece que hay más razones a favor de cambiar la hora que en contra, pero sin duda es un tema controvertido. Sea como sea, te recordamos que puedes tomar medidas de ahorro energético en tu casa y que para combatir el jet lag, no hay nada como una vida sana y ejercicio suave. ¿A ti cómo te afecta el cambio de hora? ¿estás de acuerdo con realizarlo?