La mayor parte de la población que reside en el centro de las ciudades lo hace en edificios con diferentes propietarios. Estos bloques de pisos acarrean unos gastos comunes que se reparten entre todos los vecinos. La crisis ha traído la necesidad de ahorrar energía y dinero para reducir los gastos de las comunidades de vecinos, pero en realidad son prácticas que se deben mantener para siempre, ya que consiguen que el ahorro se destine a otras necesidades de la comunidad.
Cómo ahorrar energía y dinero de forma fácil
Los gastos de una comunidad siempre recaen en dos o tres consumos de energía básicos: la electricidad, el agua y el combustible para calefacción. No todos los edificios cuentan con instalaciones centrales que usen combustible, pero los dos primeros consumos son inevitables. Veamos qué podemos hacer para reducir los gastos en cada uno de ellos y comenzar a ahorrar energía y dinero fácilmente.
Ahorra electricidad
El gasto eléctrico se concentra en la iluminación, los ascensores y los motores. ¿Cómo reducirlo?
- Revisar la potencia contratada. Muchas veces, hay más de la necesaria, y por tanto, un mayor coste. Otra posibilidad es la de instalar placas solares en el tejado del edificio.
- La iluminación interior debe hacerse con bombillas de bajo consumo o LEDs, usar temporizadores para que se apaguen tras un breve periodo de tiempo y que estén sectorizadas para que no se enciendan todas a la vez. Los detectores de movimiento son muy útiles para este propósito.
- En la iluminación exterior, hay luces que no son necesarias por el poco paso de las personas, por lo que podrían desconectarse o colocar bombillas de menor potencia. También es recomendable colocar temporizadores en los accesos desde el exterior.
- Instalar sensores de presencia en los ascensores, es un buen método para que sus luces no estén permanentemente encendidas, así como dotarlo del mecanismo de maniobra selectiva para evitar que viaje vacío.
- Revisar periódicamente el correcto funcionamiento de los motores que haya en el edificio.
Ahorra agua
Los edificios no suelen gastar mucha agua, tan solo la necesaria para las tareas de limpieza, pero en las comunidades que tienen jardines, es necesario tener en cuenta algunos aspectos:
- Elegir bien las plantas de los jardines, hay plantas que necesitan menos agua.
- Poner riego por goteo, aprovechar el agua de lluvia, y dotar al sistema con un buen programador, será de gran ayuda.
- Programar la depuradora de la piscina para que funcione solamente el tiempo necesario.
Ahorrar combustible
Aquellos edificios que cuentan con una caldera para la calefacción central, también se pueden hacer algunas medidas de ahorro:
- Renovar las calderas antiguas por unas nuevas nos hará ganar en eficiencia energética, y por tanto, disminuir el consumo y el gasto. Si es posible, cambiar la caldera de gasoil por una que funcione con gas natural.
- Colocar contadores individuales para el consumo por horas.
- Que el edificio tenga un aislamiento adecuado para no perder energía.
Con estos sencillos cambios y consejos, seguro que el gasto energético del edificio baja. Seguro que se conseguirá ahorrar energía y dinero en las facturas. Además para un resultado óptimo, se debe sumar el esfuerzo de los vecinos en pequeños gestos como:
- no encender las luces innecesariamente
- hacer un buen uso del ascensor
- hacer un mantenimiento constante en jardines y finca para su mejor conservación
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