El aire acondicionado fijo o de pared suele ser más recomendable por su eficacia y su durabilidad. Sin embargo, el aire acondicionado portátil también cuenta con una serie de ventajas que lo hace más apropiado, por ejemplo, en el caso de que solo queramos enfriar una estancia. Por eso, antes de elegir entre el aire acondicionado fijo o portátil, debemos fijarnos en el uso que le vamos, en el consumo energético y en la instalación y mantenimiento. ¡Así sí será sencillo acertar!
Equipos de aire acondicionado fijo o portátil ¿cuál elegir?
Dentro de los equipos de aire acondicionado fijos o de pared encontramos monobloque: los elementos del circuito se hallan en el mismo aparato instalado en la pared. Y los aires acondicionados Split que cuentan con unidad interior (se ubica el evaporador) y la exterior (el compresor). Eficientes y silenciosos, son una forma segura de climatizar la vivienda y disfrutar del máximo confort.
Por su parte, los equipos de aires acondicionados portátiles no necesitan de instalación previa. Se trata de aparatos económicos de una sola pieza que también se pueden usar en modo ventilador equipados con ruedas que pueden ser desplazados de una estancia a otra.
Para elegir uno u otro debemos fijarnos en las siguientes cuestiones.
La instalación y mantenimiento de los equipos
El aire acondicionado fijo requiere de una instalación y mantenimiento por parte de un profesional cualificado. Una vez el sistema esté instalado en la vivienda tendremos un aparato silencioso y potente que solo requerirá las revisiones periódicas que recomiendan los expertos. Mientras que el portátil basta con enchufarlo a la corriente teniendo en cuenta que será necesario un sistema de salida para evitar que se produzca la condensación de agua.
Aire acondicionado fijo o portátil: El consumo energético y la potencia
La potencia de los equipos fijos es mayor y, por lo tanto, proporcionarán un mayor confort en el hogar. Pero eso no quiere decir que el consumo energético y la factura sean más elevadas que la de los equipos portátiles. Al ser sistemas modernos de alta eficiencia el consumo energético puede ser menor.
El consumo de los equipos portátiles puede verse disparado según sea el aparto en sí y, dependiendo, claro está, de las horas que se deje enchufado. También hay que tener en cuenta que no es lo mismo tener en la vivienda un solo aparato que varios distribuidos en distintas estancias.
El uso que se le vaya a dar a los equipos
Como suele ocurrir con cualquier aparato eléctrico hay que fijarse en el consumo antes de elegir este o aquel sistema. En el caso de que solo se quiera climatizar una estancia, el portátil puede ser una buena opción.
Sin embargo, si la idea es refrigerar toda la vivienda o lugar de trabajo, el aire acondicionado fijo cumplirá mejor esta función. Recuerda que estos aparatos se pueden programar para que funcionen en todas las estancias o bien para que se activen en una sala y en otras no.
El precio de los equipos
Los aires acondicionados fijos son más silenciosos, eficientes y efectivos y también más caros que los portátiles que se consideran más baratos en su instalación, pero también más ruidosos y menos duraderos. A corto plazo podría ser mejor opción el portátil, pero a la larga la rentabilidad de los fijos es mucho más notable.
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