¿Sabías que los sistemas de climatización que combinan la caldera de biomasa con el suelo radiante brindan una mayor sensación de confort? Y además reducen el consumo y respetan el medio ambiente. Y es que, si apostamos por dos de los sistemas más versátiles de hoy en día, el resultado solo podría ser el mejor. ¡No te pierdas lo que vamos a contarte!
Calderas de biomasa como sistema de climatización para el hogar
Los equipos de biomasa se caracterizan por el tipo de combustible que emplean. Ya sea pellets, astillas, leña u otros restos orgánicos como cáscaras de frutos secos, todos ellos son ecológicos y naturales por lo que no producen emisiones contaminantes al medio ambiente.
Según sea la procedencia de la materia prima distinguimos entre biomasa natural: procedente de la naturaleza; residual: procedente de actividades agrícolas como huesos de aceitunas y de cultivos energéticos: procede de plantaciones de cultivos.
Su funcionamiento se lleva a cabo a través de la quema de dichos materiales orgánicos generando un calor que se distribuye por toda la vivienda. Por eso la biomasa se define como una energía renovable y por eso es de las más demandadas en la actualidad.
Suelo radiante ¿en qué consiste?
El suelo radiante, otro de los sistemas más rentables y que más auge está teniendo, se basa en un sistema que reparte el calor uniformemente por toda la casa gracias a su red de tuberías.
Su funcionamiento se realiza a través de conducciones con agua a baja temperatura si lo comparamos con los radiadores convencionales. Logrando de este modo un confort óptimo en el hogar. Lo común, como su propio nombre indica, es instalar la red de tuberías en el suelo. Pero se también se podría emplear como base las paredes o el techo.
¿Y por qué la biomasa y el suelo radiante son tan buena combinación?
Como hemos comentado antes, el calor de la quema de combustible que realiza la caldera de biomasa se distribuye al hogar a través de un circuito, pero ¿y si ese circuito fuera el suelo radiante?
Ventajas de apostar por la biomasa y el suelo radiante como sistema de climatización
- La combinación de estos sistemas ofrece el máximo confort en el lugar en que se instalan a un reducido coste y a un muy bajo impacto en el medio ambiente.
- El ahorro también es debido a que no hace falta una gran inversión inicial ni tampoco para la adquisición combustible.
- El calor generado se mantiene durante más tiempo. Por lo que la cantidad de combustible (pellets, astillas, leña…) que se va a necesitar va a ser mucho menor.
- Además, tanto uno como otro están diseñados para minimizar las posibles pérdidas de calor ¡y eso también es garantía de confort y ahorro!
- Por lo tanto, las calderas de biomasa se convierten en uno de los mejores compañeros del suelo radiante por su eficiencia, utilidad y comodidad.
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