El consumo fantasma de los aparatos electrónicos en vacaciones

Cuando hablamos del consumo fantasma nos referimos a los aparatos electrónicos que permanecen enchufados a la red de modo permanente, pero que no se usan. Es decir, se quedan en modo ‘stand by’. ¿Cuál es en verdad el gasto energético? ¿Se puede reducir de alguna manera?

Cuál es el consumo ‘fantasma’ de algunos aparatos

Listos para ser usados en cualquier momento con tan solo apretar un botón, estos aparatos suponen un consumo, en ocasiones innecesario.

De hecho, se estima que este consumo supone entre el 7 y el 11% del consumo eléctrico de un hogar. Según el IDAE, un hogar español consume unos 3.000 kWh de electricidad al año, con un precio que oscila entre 0,13 y 0,15 euros el kWh. Así, si hacemos los cálculos, el consumo fantasma supondría entre 32 y 58 euros al año.

¿Y cuáles son estos aparatos o pequeños electrodomésticos? Todo aquel que se quede enchufado sin ser utilizado. Por ejemplo, la televisión, la tostadora, el microondas, el router o incluso el cargador del móvil.

¿Por qué se produce este gasto?

Este consumo es debido al diseño de los aparatos electrónicos de última generación ya que poseen un transformador en su interior: una pieza adaptada al voltaje a través de dos bobinas. Lo que supone que aunque el dispositivo en cuestión no esté funcionando, una de estas dos bobinas sigue activa.

Sí, se puede reducir el consumo fantasma

¿Qué podemos hacer como consumidores responsables para evitar o reducir todo lo posible el consumo fantasma?

• Emplea regletas con interruptor para apagar de modo conjunto varios aparatos cuando no los vayas a utilizar.
• Además, existen regletas especiales con eliminador de Stand By. Cuando detectan una bajada del consumo del aparato conectado lo que hacen es apagar el resto de equipos. De esta manera el consumo se reduce en varios aparatos.
• De igual modo puedes usar temporizadores. Gracias a ellos podrás desconectar automáticamente aparatos en ciertos periodos de tiempo, por ejemplo, durante la noche.
• Para periodos largos como vacaciones desenchufa directamente aquellos electrodomésticos y aparatos que vas a dejar de usar como impresoras, ordenadores o tostadoras.
• No dejes el cargador del móvil, tablet u ordenador siempre enchufado. Tan solo conéctalo cuando vayas a cargar el dispositivo. Aunque no lo parezca esto también supone un consumo fantasma.
• A la hora de adquirir un nuevo aparato, consulta con el fabricante o distribuidor cuál es su consumo en reposo. Así mismo, antes de tomar una decisión, lee el etiquetado energético para conocer sus prestaciones y características de funcionamiento. Así sí podrás adquirir un equipo de calidad y eficientemente energético.
• También existe la opción de colocar un medidor en cada equipo para averiguar el consumo que realiza cada aparato eléctrico y así tomar medidas adecuadas de ahorro.

Como ves, es más sencillo de lo que parece reducir este tipo de gasto energético y con ello la factura de final de mes.

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