Radiadores de baja temperatura, por qué elegirlos

En nuestro post sobre calderas de condensación ya te presentábamos los radiadores de baja temperatura como el complemento perfecto para conseguir el máximo rendimiento de este tipo de calderas.

Hoy, con este post, te explicaremos más cosas sobre este tipo de radiadores para que conozcas mejor su funcionamiento, porque, instalar radiadores de baja temperatura puede suponer para ti un importante ahorro en calefacción.

¿Qué es un radiador de baja temperatura?

Lo primero que debes saber es que, un radiador de baja temperatura funciona de manera muy similar a los radiadores convencionales. Circula agua caliente en su interior que aumenta la temperatura del radiador, y ese calor que desprende es el que calienta la habitación donde está instalado. Sin embargo, existen diferencias importantes entre estos dos tipos de emisores de calor, como veremos a continuación.

Tradicionalmente, en un radiador convencional, el agua procedente de la caldera entra a 75ºC y sale a 65ºC en condiciones normales. Sin embargo, se ha visto que para conseguir un mayor ahorro de energía se debe reducir al máximo la diferencia de temperatura entre la temperatura del agua y la del ambiente. Con los radiadores de baja temperatura ya se cumple el nuevo el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios, desde el 2013 que fija una temperatura media de entrada en el radiador de 60ºC.

Diferencias entre radiadores de baja temperatura y radiadores convencionales:

• Los radiadores de baja temperatura consumen menos energía porque no necesitan trabajar con altas temperaturas de agua para generar el mismo calor que los radiadores convencionales.
• Instalando radiadores de baja temperatura puedes conseguir hasta un 20% de ahorro de energía con respecto a los radiadores convencionales.
• Aumentan el rendimiento de los generadores de calor (caldera de condensación, aerotermia…), provocando una menor emisión de CO2 a la atmósfera, luego los radiadores de baja temperatura ayudan a contaminar menos.
• Su interior es diferente, los de baja temperatura suelen contar con una batería de cobre con aletas de aluminio, y exteriormente están recubiertos con chapa plana, de esta forma consiguen calentar el aire alrededor de la batería y expulsarlo por la parte superior del radiador maximizando así la convección.
• Los radiadores de baja temperatura necesitan una menor cantidad de agua en su interior, por lo que calientan la habitación más rápidamente y se disminuye las pérdidas de calor.

¿Cuáles son las ventajas de los radiadores de baja temperatura?

• Consiguen que los sistemas de calefacción de baja temperatura funcionen con un rendimiento superior al 100%.
• Disponen de un control electrónico que detecta los cambios de la temperatura ambiente y se pone rápidamente en marcha cuando hay alguna variación, para conseguir la temperatura necesaria rápidamente.
• Instalación sencilla y económica, tanto si es para sustituirlos por los convencionales o se trata de una primera instalación.
• Son más seguros para los niños pequeños que otros emisores de calor, porque su chapa exterior no quema al tocarla.
• Su mantenimiento no es nada complicado porque se puede acceder fácilmente al intercambiador de calor para poder limpiarlo cuándo sea necesario.
• Son una buena alternativa si quieres instalar aerotermia y no puedes instalar suelo radiante.
• Encajan en cualquier estilo de decoración ya que tienen dimensiones reducidas y un cuidado diseño.

En Ferroservice te podemos asesorar sobre el tipo de radiador más adecuado para tu sistema de calefacción. Si necesitas ampliar esta información, no dudes en contactar con nosotros, estaremos encantados de poder ayudarte.